"Checo Pérez y Max Verstappen iban a correr con neumáticos duros en Hungría"

Sergio Checo Pérez y Max Verstappen estuvieron cerca de hacer el ridículo y sufrir en el Gran Premio de Hungría, tal como finalmente ocurrió con Carlos Sainz y Charles Leclerc.

De arranque la idea era que usaran neumáticos duros, pero Christian Horner y Hannah Schmitz finalmente decidieron que no fuera así y los salvaron de un problema grave.

La goma rígida resultó ser un verdadero desastre en Hungaroring. Varios equipos, incluidos Haas, Alpine y McLaren, intentaron con la variante blanca, pero sin éxito. Ferrari finalmente también optó por poner a Charles Leclerc en este neumático, lo que generó muchos malentendidos dentro y fuera del paddock.

Hannah Schmitz reveló que Max advirtió por la radio del equipo que no era una buena idea y su consejo no pasó desapercibido.

"Debido a que comenzamos fuera de posición, esa es una de las estrategias más clásicas para aplicar, comenzar en la banda dura y durar mucho más. Especialmente porque adelantar era difícil en Hungría, así que ese era nuestro plan", expresó en charla con Sky Sports.

Discutir, clave

Verstappen y Pérez expresaron por radio que no tenían agarre y eso provocó una charla dentro del paddock austriaco. Al final se tomó la decisión de ponerles las llantas más suaves.

"Ambos pilotos fueron muy claros sobre el hecho de que apenas tenían agarre, a pesar de que ya estaban con el neumático blando", explicó Schmitz.

Eventualmente condujo a una discusión interna considerable. Incluso el jefe del equipo, Christian Horner, estuvo involucrado.

“Los ingenieros de carrera dijeron entonces: 'No creemos que los neumáticos duros sean una buena idea'. Todos tuvimos una larga discusión con Christian al respecto y decidimos cambiar a neumáticos blandos", confesó Hannah.

Al final Max Verstappen se quedó con el triunfo después de iniciar décimo, mientras que Sergio Pérez acabó quinto tras comenzar decimoprimero.