Sergio Checo Pérez está sumamente dolido después de haber abandonado en el Gran Premio de Austria. Ha culpado a George Russell por haberlo provocado.
En la primera vuelta hubo un contacto entre el de Red Bull y el de Mercedes que mandó al primero a la trampa de grava con trompo de por medio. Después volvió en el último lugar y en la 26 dejó la carrera.
El mexicano admitió estar triste sobre todo porque cree que tenía ocasión de buscar un resultado positivo.
"Una pena que haya terminado todo tan temprano, creo que había buenas posibilidades de tener una buena carrera, y muy desafortunado.
"Creo que de mi parte hice todo lo que tenía que hacer. Le di suficiente espacio a George y no pudo controlar su auto, y se fue contra mí. Más que eso no podía hacer porque ya estaba en la grava, entonces, una pena que todo haya terminado así", explicó tras la competencia.
"No había nada que hacer"
Completamente resignado admitió que después de volver en la última posición ya no podía pelear por una mejora en un GP en el que ya llevaba una vuelta de desventaja.
"Tenía muchísimos daños en el auto y no era posible continuar. Ya la carrera estaba perdida, ya habíamos perdido una vuelta, no había nada que hacer el día de hoy", sentenció.
Una pena que nuestra carrera terminara así, le di bastante espacio a George para poder los dos hacer la curva. A pensar, descansar un poco y preparar las próximas dos carreras 💪 #nevergiveup#AustrianGPpic.twitter.com/bNLahS7lGD