El español ha reconocido que el canadiense lo pasó realmente mal en muchas ocasiones, pero destaca que nunca se dio por vencido.
No fue un año fácil para Stroll, quien padeció con un AMR23 que no le respondió como quería durante toda la temporada.
Al final la diferencia entre ambos fue de 132 puntos, pero Fernando se queda con lo mejor de Lance, su actitud.
“Él tuvo que pasar por algunas dificultades este año. El comportamiento del coche cambió un poco y él tuvo un poco más de problemas que yo.
"Pero tenemos algunas cosas bajo control y ahora está de nuevo en plena forma", aseguró en palabras recogidas por Speedweek.
Compromiso
Especialmente valora que jamás se rindió. Estaba decidido a sacar lo máximo que pudiera del coche.
"Su compromiso y motivación fueron notables. Tuvo algunas dificultades a principios de año con la mano rota y hacia mitad de temporada, pero estaba decidido a volver a encarrilar las cosas. Luego lo logró. Para ser honesto, me sorprendió lo comprometido y motivado que está”, agregó.