¿Qué aprendimos del GP de México?

Para Max Verstappen, dos veces campeón mundial, la victoria en México fue una con un borde dorado tras lograr su decimocuarta victoria del año y hacer historia. Esto fue lo que aprendimos del Gran Premio de México.

Durante el fin de semana de carrera, el peligro procedía principalmente de Lewis Hamilton, pero la elección de los neumáticos aseguró que la victoria del neerlandés no peligrara.

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Sergio Pérez cruzó la meta tercero y llevó la alegría a la grada con su actuación, mientras Ferrari no logró ser competitivo en México con el quinto lugar de Carlos Sainz y el sexto de Charles Leclerc.

Verstappen, el paquete completo

El hecho de que Max Verstappen es rápido como un rayo y puede ser despiadado en combate es un hecho bien conocido. Ambas cualidades se notaron constantemente en sus dos primeros campeonatos.

Pero la carrera del domingo mostró un lado diferente del holandés, que comenzó a destacar en Austin una semana antes.

Verstappen comenzó con neumáticos blandos, pero cambió a neumáticos medios para una segunda tanda que finalmente duraría 46 vueltas, aunque se pensó de antemano que esto no sería posible.

Pero Max logró conservar sus neumáticos y extendió el stint para abrir una brecha con el británico. Con una ventaja de 15,1 segundos al final de la carrera, el dos veces campeón del mundo demostró que se ha convertido en un piloto completo de Fórmula 1.

Mercedes titubea

Los neumáticos duros fueron desfavorables durante todo el fin de semana y tanto Hamilton como George Russell tuvieron la oportunidad de comenzar con los neumáticos medios para extender el primer stint y montar los blandos para un ataque al final de la carrera.

Pero Mercedes optó por una estrategia diferente, respaldada por los modelos de cálculo del equipo. Un cambio a los neumáticos duros estaba a la vista para el dúo de Mercedes. Como resultado, Lewis no pudo atacar a su rival Verstappen y tuvo que mirar hacia atrás y defenderse de Checo.

Fue un despiste estratégico por parte de las Flechas de Plata que, aunque no signifique mucho esta temporada, habrá que subsanarlo si el equipo quiere volver a competir por el título el año que viene.

Guerra entre Alpine y Alonso

Otra carrera con un problema de motor para Fernando Alonso. El bicampeón se dirigía a una P7 después de poner al Alfa Romeo de Valtteri Bottas a 20 segundos del inicio de la carrera.

También su compañero de equipo Esteban Ocon no pudo seguir el ritmo del español. Pero Alonso perdió uno de sus seis cilindros antes de que su motor finalmente fallara, con seis vueltas para el final.

El español ha perdido más de sesenta puntos por fiabilidad y la sugerencia de que tiene un auto malo no cae bien con el equipo; sin embargo, para bien o para mal, aún les quedan dos carreras más hasta el final de temporada.

Ricciardo demuestra que el talento sigue ahí

Ha sido una temporada miserable para Daniel Ricciardo, pero con vistas a regresar a la Fórmula 1 en 2024, resultados como el del domingo no le vienen mal.

El piloto de McLaren comenzó fuera de los diez primeros y corrió fuera de los puntos durante gran parte de la carrera. Ricciardo optó por la estrategia medios-blandos y le funcionó.

Una colisión con Yuki Tsunoda le costó a Daniel diez segundos, pero ascender desde fuera de los puntos hasta el séptimo en veinte vueltas y ampliar la brecha de diez segundos con Ocon hizo que se sintiera como el Ricciardo que amamos en la última década.

La sonrisa radiante regresó con alegría genuina en lugar de una máscara protectora después de la carrera. Más de lo mismo por favor en Brasil y Abu Dhabi.

El comportamiento de los fanáticos

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Sabemos que el abuso en las redes sociales y por parte del público durante las carreras ha sido un problema durante mucho tiempo, pero los problemas en el Gran Premio de la Ciudad de México fueron posiblemente más alarmantes.

Había poco espacio para moverse en el paddock, donde los pilotos y jefes de equipo eran acosados por aquellos que tenían la suerte de acceder a la zona.

El personal de seguridad tuvo que formar círculos de protección alrededor de las estrellas del espectáculo, aunque Pierre Gasly reveló que su bolso había sido abierto de camino a la hostelería. Muestra que la clase real todavía tiene una serie de pasos que dar en el campo de la seguridad.

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